Emily DiDonato es retro glam en la portada de enero de 2016 de Vogue México. Ataviada con un vestido Gucci a rayas y un lujoso abrigo de piel, la morena comienza el año con una nota colorida, canalizando el estilo de la década de 1970. El editorial de moda que lo acompaña fotografiado por David Roemer es igualmente cautivador. Emily sale a las calles de la ciudad de Nueva York con looks de inspiración retro diseñados por la editora de moda Sarah Gore Reeves.
La belleza estadounidense se destaca en elegantes vestidos cruzados, sombreros flexibles y vestidos ligeros. Junto con su cabello en ondas brillantes gracias a Felix Fisher y una sombra de ojos ahumada cortesía del maquillador Georgi Sandev, Emily es un sueño de los años 70.